De esta manera, continúan los trabajos para abordar una de las mayores problemáticas que atraviesa la ciudad de Tolhuin: los canes que deambulan en el ejido urbano, por la irresponsabilidad de los dueños, y que luego terminan asilvestrándose, lo cual no solo trae problemas con el ganado y los productores, sino también con las especies autóctonas y la población a través de las enfermedades zoonóticas.

Al respecto, el Director de Bromatología y Zoonosis de la Municipalidad de Tolhuin, Juan Manuel Alberti, expresó que la jornada tuvo un balance positivo, pese a que mucha gente que confirmó sus turnos no asistió (de los 100 perros inscriptos, sólo acudieron 49). Asimismo, Alberti manifestó que “estas actividades se van a seguir desarrollando porque contamos con el fuerte apoyo de las instituciones que participaron el domingo”.

Por su parte, la médica veterinaria del INTA, Cecilia Escribano, agregó que “el sentido de esta jornada radica, principalmente, en generar conciencia para que los vecinos se acerquen a castrar a sus mascotas en el quirófano móvil, ya que el mismo funciona durante todo el año”.

En tanto, el titular del área de Zoonosis de Tolhuin explicó que “es importante castrar machos y hembras, ya que muchos dueños tienen ciertos prejuicios y en la jornada vimos claramente que más de la mitad de las mascotas eran hembras”.

“En la provincia tenemos una gran población canina, entonces castrando disminuimos el índice de parición y vamos a tener menos animales en la calle. Con esto evitamos mordeduras y enfermedades zoonóticas (aquellas que se transmiten a las personas) como parasitosis, hidatidosis, toxocariosis o brucelosis”. Por otra parte, Alberti aseguro que “castrando aumentamos la salud del animal porque evitamos tumores dependientes de hormonas, como los de ovarios y testículos, y la piómetra que es una infección de útero que se produce en las hembras no castradas”.

En cuanto a tenencia responsable, los veterinarios coincidieron en que “si tenemos un animal en casa, esa mascota es un ser vivo que requiere todos los cuidados necesarios: darle un buen trato, vacunarlo, desparasitarlo, brindarle toda la salud y el cariño posible porque son parte de la familia”.

El trabajo realizado el pasado domingo fue posible, además, por el acompañamiento de los veterinarios de la Municipalidad de Río Grande (Alejandro Álvarez y Norma Moya) y veterinarios particulares de la ciudad de Ushuaia (Juan Manuel Vittori, Alexandra Luiso, Marcelo Insegna y Virginia María Tomasoni). También participó personal de la Municipalidad de Tolhuin de las áreas de Obras Públicas, Catastro, Secretaría de Planificación, Habilitaciones Comerciales, Cultura y Deportes, quienes cedieron el espacio del Polideportivo.

Por último, al referirse a la problemática de los perros sueltos, Juan Manuel Alberti señaló que “es algo bastante complicado porque no solo afecta la ganadería ovina en la provincia sino que afecta a las especies silvestres autóctonas y, obviamente, a la población”. Alberti informó además que “junto a Walter Noriega, estamos estudiando el comportamiento de las jaurías, salimos al campo y hemos puesto cámaras trampa”.

“Esto no es a corto plazo -agregó- desde los años ‘60 hay animales sueltos en la provincia y esto se acrecentó también por la tenencia irresponsable de mascotas, así que con este estudio sabremos cómo se manejan las jaurías para dar una solución”. En tal sentido, Alberti detalló que “como ya conocemos bastante la genética de estos animales, ahora necesitamos evaluar su comportamiento: No es lo mismo un ataque de perros asilvestrados en la zona norte de la provincia, donde los perros tienden a ser más chicos (de unos 15 o 20 kilos) a los que están en el monte de Tolhuin (que superan los 40 kilos) y se comportan de otra manera, recorren kilómetros por día, tienen jerarquía dentro la manada y representan un verdadero peligro para la sociedad toda”.