"Tenemos trece personas fallecidas. A medida que el agua baja y podemos mover principalmente los automóviles, nos fuimos encontrando con diferentes novedades. Ese es el dato más relevante", aseguró el funcionario de Axel Kicillof.

El sábado la ciudad de Bahía Blanca amaneció con el cielo despejado, 20 grados y un viento intenso que colaboró con las tareas de limpieza y secado de muebles y pertenencias que iniciaron los habitantes.

Tras la tormenta y las inundaciones en toda la ciudad, por estas horas seguían comprometidas las zonas de General Cerri e Ingeniero White.

“En Cerri el agua descendió mucho y está en un nivel bajo, a la altura de los tobillos", explicó Alonso y agregó, “la localidad más complicada hoy es Ingeniero White, que acumula todavía mucha agua. La pleamar está haciendo que el agua todavía no pueda drenar".

En la zona estuvieron este sábado el gobernador provincial, Axel Kicillof, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el ministro de Defensa, Luis Petri, coordinando asistencias con el intendente local Federico Susbielles.

Facundo Borri, Presidente de la Cámara de Comercio de Bahía Blanca, describió el panorama, "la verdad que en Bahía Blanca es muy triste lo que estamos pasando. Gran parte está todo inundada".

El agua alcanza hasta la cintura en zonas céntricas, complicando los esfuerzos de los comerciantes por salvar sus negocios. Borri señaló que, "las pérdidas son totales. Estamos toda la ciudad sin luz, con muchísimos problemas, el Ejército y el Municipio no dan abasto ante la magnitud de la situación. Nunca se ha visto una tormenta de esta magnitud".